Ahorro
La diferencia entre nuestros ingresos y el presupuesto será la cantidad que tengamos disponible para ahorro e inversión. Lógicamente, cuanto más mejor, pero tampoco hay que obsesionarse con ahorrar a toda costa. En mi opinión, lo importante es empezar a ahorrar cuanto antes para tener un colchón financiero y después comenzar con la inversión. Por muy poco que sea, lo importante es empezar.
¿Qué cantidad deberíamos tener en ese colchón antes de empezar a invertir? Pues depende, pero yo he visto que se recomienda tener unos 6 meses de ingresos. Yo ahora mismo tengo menos porque tengo una cierta estabilidad laboral. Si en el futuro alcanzo la independencia financiera, me gustaría tener al menos doce meses de gastos en mi colchón porque mis ingresos van a venir de mis inversiones y el colchón me servirá para amortiguar los vaivenes del mercado.
Si tenéis una situación más o menos estable, podéis plantearos empezar a invertir a la vez que ahorrar, pero definiendo muy bien el objetivo a corto plazo de tener el colchón de seguridad. Por ejemplo, podríais empezar a destinar un 20% a la inversión y un 80% al ahorro. Aunque según el dinero que tengáis disponible, quizás no merezca la pena empezar a invertir si es una cantidad muy pequeña.
He puesto los objetivos después del ahorro e inversión, porque creo fervientemente que lo más importante es empezar. Quizás luego no seamos capaces de reunir una cantidad suficiente para invertir, o solo podamos invertir lo suficiente para irnos de viaje el día que nos jubilemos, pero al menos tendremos el colchón de seguridad para cualquier imprevisto que nos surja.